Apocalipsis. 3:1617

"Mas porque eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca."

Lo cultural/ideológico en manos explotadoras: manipula, mediatiza, limita y oprime hasta la total dominación.

miércoles, 13 de enero de 2010

TSUNAMI.CUBA

LA POLILLA CUBANA
Guantánamo.- La tarde este martes 12 de enero quedará grabada en la memoria de Baracoa como un pavoroso crepúsculo en que una palabra de origen asiático puso a correr a casi todo el mundo: tsunami. La voz de origen asiático, lanzada al olvido después de aquel fatídico evento que mató a miles de personas en la distante isla indonesa de Sumatra, en 2004, ahora envió de golpe a casi 30 mil baracoesos a “El Paraíso”, elevación ubicada al fondo de la ciudad Primada de Cuba.
Rapidez, disciplina y cooperación ante el peligro en Baracoa Sismo en Haití repercute en Santiago de Cuba.
Incertidumbre y preocupación por situación en Haití.
Pero ayer a la señal emitida por las autoridades pertinentes tenía su génesis en el terremoto de 7.0 grados registrado en Puerto Príncipe, la capital de Haití, que generó inmediatamente un alerta de tsunami para las costas haitianas, además de Cuba, República Dominicana y Bahamas, que luego se desactivó.
La población reaccionó rápidamente ante el llamado que por diversas vías las hicieron las autoridades para evacuar la ciudad, hacia la zona del Paraíso sobre todo las casi 30 mil personas que viven en el litoral, fundamentalmente el malecón, el casco histórico, el Turey y otros consejos populares, aseguró el jefe del departamento informativo de CMDX La Voz del Toa Atmer Suárez Hinojosa.
« El temblor de tierra se sintió muy fuerte, yo estudié en Santiago de Cuba y sé lo que es un fuerte temblor. A pesar de la premura y el pánico la evacuación funcionó bien y rápido, en apenas 10 minutos la gente estaba en el paraíso, dice Atmer.
Nancy Camacho Matos no recuerda que pasadas las 5 de la tarde sintió la sacudida de un reloj colgado en la pared del local donde varios ancianos como ella, organizaban una actividad del club de la tercera edad, en su barrio del centro de la ciudad. Rememora -vía telefónica a estos reporteros- que antes de que pasara un helicóptero de la Defensa civil, informando a la población y llamando a la calma, ya ella estaba en la parte más alta del Paraíso, una privilegiada altura de la Primada de Cuba.
Dice la señora de 70 años que, incluso, muchas personas que viven alejadas del mar se fueron al Paraíso cuando comenzó, -no sabe ella ni como ni cuando- a mencionarse la palabra tsunami entre los que corrían asustados.
Acostumbrados ya al corre-corre de quienes viven cerca del malecón baracoense, por el peligro de las penetraciones marinas, Santiago Garrido partió con los suyos hasta cerca del Castillo, también en la parte alta. «En los primeros momentos hubo pánico, pero poco a poco regresaba la calma»afirma este joven de 38 años, interpelado igualmente sorteando el congestionado tráfico telefónico que se generó con la primera capital de los cubanos.
María Frómeta compraba el pollo de la libreta de abastecimiento, mientras ya la gente andaba despavorida por las calles, tomando cualquier atajo hasta la cima del Paraíso. Pero la idea de un buen guisado se desvaneció como la cola, y puso pie en polvorosa hacia su casa y con su niña y el resto de la familia se fue a las lomas
Mientras, la voz de Zenia Noa, una joven periodista de primada visión, se unía a la de locutores y reporteros de la planta radial CMDX La Voz del Toa para pedir calma a la población y que se alejara ordenadamente de la zona costera, donde, el mar parecía imperturbable, sereno y hasta risueño con el derroche de adrenalina tierra adentro.
Al filo de las 9 de la noche el presidente del Consejo de Defensa Municipal de Baracoa – activado inmediatamente- Eudis Romero Suárez, anunciaba en la radio local que por indicación de ese órgano las personas evacuadas estaban de retorno a casa y había tranquilidad en la bella ciudad paisaje.
Romero Suárez, encomió la disciplina y el alto nivel de cooperación de los ciudadanos, la solidaridad ante la contingencia y la rapidez y cohesión con que actuaron los organismos del territorio. Esa noche en Baracoa se durmió con un ojo abierto y otro cerrado atento a los caprichos del mar que, por suerte, esta vez, fue indiferente ante el grito aterrador de: tsunaaaaamiiii

No hay comentarios.:

Publicar un comentario