Un nueva película venezolana: La Mujer del Coronel. Es la gran historia de amor de la Venezuela del siglo 19 (1814- 1818). El país lleva varios años de una guerra cruel y sangrienta; los venezolanos se dividen entre los que sueñan con la libertad y los que prefieren seguir siendo fieles a la monarquía. Muy a pesar de éste panorama, Luisa Cáceres, heroína de nuestra independencia y Juan Bautista Arismendi, prócer del ejército patriota, se empeñarían en vivir una de las historias de amor más dramáticas e inolvidables de nuestra historia.
Luisa Cáceres, quien está por cumplir 15 años conoce a Juan Bautista, 39 años, coronel del ejército patriota y viudo, en uno de los pocos bailes que se dan en la época. Luisa Cáceres inmediatamente se da cuenta que está frente al hombre de su vida, mientras que él cae a los pies de una niña que lo despierta nuevamente al amor. Los padres de Luisa se oponen al compromiso, pero el amor y el destino ya habían tocado sus almas.
La guerra empieza a sentirse en Caracas, Juan Bautista es transferido a Nueva Esparta, mientras Bolívar, al mando del ejército venezolano, le pide a los habitantes de Caracas que abandonen la ciudad. Luisa y su familia, desvastados por la muerte de su padre y hermano en la guerra, se dirigen al Oriente del país.
Escapan más de 20.000 personas y mueren en el camino más de la mitad. Luisa sufre uno de los momentos más duros de su vida, pero la esperanza de encontrarse nuevamente con Juan Bautista la mantienen en pie. Finalmente Luisa Cáceres, con la ayuda de Adams, un corsario americano, se reencuentra con Juan Bautista Arismendi y se casan. Al poco tiempo ese amor es nuevamente truncado: Luisa es detenida por los realistas y encerrada en la prisión de la fortaleza de Santa Rosa y allí es víctima de torturas para que revele el lugar donde se esconde su esposo. Luisa, prisionera, se enfrenta otra vez a la tragedia, cuando da a luz un niña que nace muerta. Este suceso entristece profundamente a Juan Bautista y casi lleva a Luisa a la locura. Juan Bautista desesperado intenta liberarla, pero le es imposible. En un último intento los realistas le hacen creer a Luisa que Juan Bautista ha muerto y ante el eminente ataque de Juan Bautista, ella es llevada a España de donde finalmente se escapa.
Luisa regresa a Venezuela en 1818 y en medio de un gran recibimiento se reencuentra con Juan Bautista, el mismo día que su esposo está por fusilar a Adams. Nunca más volvieron a separarse.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario